La campaña de espárragos comenzó este año con un retraso general de 2 a 3 semanas. ¿La causa? Un clima inestable, con noches especialmente frescas que impidieron el calentamiento de los caballones y, por tanto, el desarrollo de los turiones. «El inicio ha sido lento en todo el país. El sureste normalmente llega con una semana o hasta 15 días de antelación respecto al suroeste, pero este año ha sido al revés. En resumen, en este contexto de inicio tardío, ha sido el suroeste quien ha tenido la mejor entrada en campaña», explica Christian Befve, experto de renombre internacional en producción de espárragos.

«Casi nos faltó volumen para Pascua»
A pesar del retraso en los volúmenes, el mercado está bastante equilibrado y la calidad es buena:
«En cuanto a calidad, no hay nada que objetar. También estamos ante un año de calibres grandes. Y los precios, al haber poca producción al inicio, empezaron muy altos, pero luego bajaron a un nivel bastante aceptable tanto para el productor como para el consumidor. El hecho de que no haya exceso de volumen ayuda a mantener los precios en niveles decentes. Este año, casi nos quedamos sin producto para Pascua y seguimos con escasez».
Una “ofensiva holandesa” que tuvo poco impacto
En este contexto de precios razonables, volúmenes controlados y poca competencia extranjera, el consumo es más que aceptable:
«Este año, la competencia europea es muy limitada debido al mal tiempo que afecta a todos los países productores, lo cual favorece la demanda de espárrago francés.
La semana pasada, antes del fin de semana de Pascua, llegaron espárragos de muy buena calidad desde los Países Bajos a un precio de 3,50 €/kg puestos en Rungis.
Los holandeses tienen la costumbre de exportar a precios bajos su excedente para aligerar su propio mercado. El año pasado lo hicieron durante unas dos semanas y eso desestabilizó mucho el mercado. Pero este año, esa pequeña ofensiva ha tenido poco efecto. Los compradores ya saben que se trata de una operación puntual.»
Un renovado interés por plantar espárragos
Con un mercado dinámico y ligeramente desabastecido, cada vez más productores quieren iniciarse en el cultivo de espárragos o ampliar su superficie:
«Llevo dos años diciendo que las temporadas difíciles ya pasaron y que hay que volver a plantar. Ahora se nota un nuevo impulso. Deberíamos estar tranquilos durante los próximos diez años.
Sin embargo, hay que anticipar ya las necesidades de plantación para 2026 y comunicarlas cuanto antes a los viveros, que siembran en abril.
Llevan varios años teniendo que desechar coronas. Para reducir pérdidas económicas, ahora solo producen bajo pedido. Por eso es fundamental que los productores les indiquen desde ya sus necesidades si quieren asegurarse las variedades deseadas.»
Más información:
Christian Befve
Christian Befve & Co
christian@befve.com
www.befve.com
Fecha de publicación: Miércoles, 23 de abril de 2025
© FreshPlaza.fr / Aurélie Pintat